Iba a empezar el post quejándome del calor, pero ya me hago pesada con el tema así que iré al grano, a la receta que nos ocupa.

En este caso, un crumble de cerezas, crujiente por fuera y suave por dentro. Sí, la receta es extremadamente fácil y sí, hay que encender el horno pero por poco tiempo.

Puedes ver esta receta y 49 más en el recetario «50 Recetas de Verano».

Ingredientes para 4 raciones:
– 600 gr de cerezas
– 50 gr de pistachos triturados
– 200 gr de harina
– 125 gr de azúcar
– 125 gr de mantequilla pomada

Precalienta el horno a 200ºC.

Para la cobertura del crumble, mezcla la harina con el azúcar y la mantequilla, hasta obtener una pasta (no debe ser compacta).

Lava bien las cerezas y quítales el hueso. Para quitárselo fácilmente, hazles un corte en forma de cruz en la parte del rabillo y empuja por el otro lado con un palillo chino.

Engrasa los moldes que vayas a utilizar. Reparte las cerezas por los moldes, cuidando de no dejar huecos.

Desmenuza la pasta por encima y hornea durante 35-40 minutos o hasta que la masa esté dorada.