Una de mis favoritas, sin lugar a dudas. Me resulta reconfortante llegar a casa en invierno y tomarme una crema de calabacines calentita. Fácil y rápida de hacer, ¿se puede pedir más?

Ingredientes para 2:
– 2 calabacines medianos
– 4-5 patatas pequeñas
– 1 cucharada de queso cremoso
– Sal
– Pimienta
– Mantequilla
– 1 vaso de agua
Pela las patatas y trocéalas pequeñas.
Lava los calabacines y córtalos también a trozos pequeños, ya que ello facilita y agiliza la cocción -Yo normalmente les dejo la piel porque es donde más vitaminas tienen y da un color diferente a la crema.
Deshaz un poco de mantequilla en una cacerola y rehoga las hortalizas. Al cabo de 5 minutos, salpimenta y añade el vaso de agua. Tapa la cacerola y deja cocer unos 5 minutos más, hasta que los ingredientes estén tiernos (el tiempo de cocción dependerá del tamaño de los trozos, compruébalo pinchándolos con un tenedor).
Agrega el queso y tritura con la batidora o minipimer.
Para acompañar, tienes múltiples opciones, como casi con todas las cremas: desde unos simple croutons, un poco de jamón picado, unas virutas de parmesano…